“Estoy hablando de una nueva Telefónica. Una Telefónica preparada para los próximos 100 años. Una Telefónica comprometida con hacer nuestro mundo más humano y más sostenible. Una Telefónica con el propósito de generar valor para todos sus grupos de interés y la sociedad a largo plazo, creando relaciones de confianza, con crecimiento y eficiencia”, afirmó José María Álvarez-Pallete, presidente y CEO de la firma. Latinoamérica ¿Qué pasará en el negocio en la región? La hispana detalló que otra de esas cinco estrategias tiene que ver con la creación de un “spin-off operativo de Hispanoamérica”, que aglutine los negocios de Telefónica en el resto de países de Latinoamérica donde hoy opera, menos Brasil. “La historia de nuestra compañía no se entiende sin la apuesta desde hace 30 años por Latinoamérica, que ha hecho de Telefónica una compañía mejor. Siempre hemos mostrado un fuerte compromiso por la región, incluso en sus momentos más difíciles”, dijo Álvarez-Pallete en un comunicado de la compañía. Algunos medios han interpretado este ítem como que la hispana empieza a escuchar ofertas por sus negocios en estos países, entre los que se encuentra Chile. “Necesitamos cambiar, ser dueños de nuestro propio destino ante unos modelos que se agotan y es el momento de abrir la discusión para estar expuesto a los nuevos mercados”, ha indicado Álvarez-Pallete, presidente Ejecutivo de Telefónica, en respuesta a los periodistas, en referencia a la intención implícita de desprenderse de los activos en Latinoamérica, o bien activar salidas a bolsa o promover alianzas. “Si todo lo anterior significa reducir nuestra exposición en Latinoamérica, lo haremos”, ha recalcado Álvarez-Pallete, tras recordar que “las condiciones particulares en estos mercados han impactado en la evolución de nuestros negocios, mermando su contribución en los últimos años por distintos motivos, a pesar de los enormes esfuerzos de los equipos locales, que siempre han mostrado un fuerte compromiso”. El español precisó que este “spin-off” contará con un equipo de gestión específico y diferencial al del resto del Grupo, que tendrá como objetivo fundamental “la atracción de inversores y la obtención de potenciales sinergias con otros agentes de los mercados, con una filosofía de garantizar y maximizar el servicio que le ofrece a sus clientes”. Complejo negocio en Chile Movistar, la filial móvil de Telefónica y su principal negocio, venía perdiendo terreno en los últimos años en Chile, en medio de la fuerte competencia en el sector que tiene como rivales a Entel, a Claro, del grupo América Móvil (Carlos Slim), y también a Wom, que ingresó al país con una agresiva campaña de marketing y precios bajos. Y aunque su utilidad en 2018 fue de US$ 28,2 millones, un 79,9% más que en el año anterior, es una cifra lejana a lo que era en 2010, año en que la ganancia fue de US$ 150,8 millones. Y este desempeño no ha estado exento de desvinculaciones. En febrero la empresa anunció en Chile despidos masivos de más de 200 personas. ¿La razón? La necesidad de encontrar un perfil de empleados más cercanos a la innovación, reemplazando esa dotación durante este año, dice un conocedor de la empresa. Más allá de ello, las cifras dan cuenta de una reducción paulatina de empleados desde al menos cuatro años. Entre 2015 y 2018, la dotación de Telefónica Chile ha disminuido 9,3%, pasando de tener 4.353 empleados directos en 2015, a 3.945 en 2018. Hoy, en el edificio corporativo se ven espacios vacíos, un incentivo más para rearmar la estructura física de la empresa. Actualmente, el 40% de los trabajadores de Telefónica Chile hace teletrabajo una vez a la semana y el objetivo es seguir aumentando dicha cifra. Sin embargo, explican que para algunos es más complejo lograrlo, por lo que el CEO de la compañía decidió habilitar espacios en diversas comunas de Santiago para que tengan la posibilidad de elegir un lugar más cercano a su hogar para trabajar. El edificio Pero una de las señales de que la hispana empezaba a evaluar su salida de Chile fue la puesta en venta de su emblemático edificio en Plaza Italia, probablemente el ícono de la explosión del fenómeno de la telefonía celular en el país. La compañía decidió otorgar un mandato a CBRE Chile como asesor exclusivo para una operación de “Sale & Lease” o venta con arriendo del denominado “distrito Movistar”, activo que consiste en un complejo de tres edificios, con aproximadamente 34 mil metros cuadrados útiles en oficinas. De ellos, el principal es la icónica torre o edificio corporativo, ubicado en Plaza Italia. “Mientras en los años 90 los grandes edificios corporativos tenían un importante valor simbólico, hoy lo que los clientes demandan es la inmediatez y los servicios de excelencia. A su vez, las compañías despliegan cada vez más tecnologías y espacios colaborativos para innovar. Y sumado a esto, destaca también la fuerte implementación del teletrabajo que, en el caso de Movistar Chile, ya es utilizado por el 50% de sus colaboradores y seguirá extendiéndose”, explicaron desde la compañía.